¿Has pensado en lo apretado – y a la vez increíblemente cómodo – que debe haber estado tu bebé dentro de tu panza? Hacerle fotos dentro de un molde de tu propio cuerpo es una bella forma de visualizar esto y, a la vez, de guardar un recuerdo de su tamaño y flexibilidad en esta etapa de “recién nacido” que dura tan poquitos días!
El proceso comienza con la creación del molde de tu vientre. Esto podemos realizarlo en la comodidad de tu hogar, ya que idealmente se hace en las últimas semanas de gestación. En el caso de este molde en particular, la madre quería que se creara su torso completo, pero también podemos hacer un molde sólo de panza.
Siento que la ausencia de color en los moldes hechos en yeso brinda esa sensación de lienzo fresco, el comienzo de una historia y de una vida.
Una vez listo el molde, ¡esperamos a que nazca tu bebé!
¡Bienvenido Benjamín! A Karina, la mamá de Benja, la conocí cuando estaba esperando a su tercera hija. En esa oportunidad hicimos pintura de pancita y fotos en la playa (que quedaron bellísimas también), así es que para esta vez queríamos hacer algo diferente!
Benjamín estuvo muy cómodo y sonriente durante toda su sesión en el molde, y por supuesto, luego también hicimos algunas imágenes más tradicionales en estilo “newborn” y con sus hermanos mayores!
El objetivo final de Karina era decorar el molde para poder exhibirlo en algún rincón de la habitación de Benjamín. Buscando en internet, encontramos esta hermosa idea con mosaico, que realizó la artista viñamarina Marcela Peña. El molde decorado fue montado en un marco de color blanco para colgar en una pared.
Y lo más hermoso de todo, es que es una luminaria también! ¿Te gustaría tener un recuerdo así para la habitación de tu bebé?
