Esta es Rominna, embarazada de 36 semanas. Rominna me contactó un día lunes: había visto la sesión de Cathy y Pato en la playa y quería hacer unas fotos parecidas, pero le urgía que fuera pronto por lo avanzado de su embarazo. Me pidió que hiciéramos la sesión fotográfica esa misma semana, y menos mal, porque su hija Leonor nació dos días después de que tomáramos estas fotos :-)
Nos juntamos un viernes en la mañana en el Paseo Gervasoni, en pleno cerro Concepción de Valparaíso. Aprovechando el lindo día y que todavía no era full-hora de turistas, caminamos por el pasaje Gálvez hasta Fisher, donde hicimos estas fotografías de Rominna y su marido Gonzalo, los futuros padres.
Frente a una casa en el pasaje Templeman jugamos un rato con estos almohadones en forma de corazón, uno rojo por mamá y uno azul por papá, quienes esperaban ese día con ansias la llegada de su Leíto.
Valparaíso se llena cada vez más de colores y expresión artística en sus muros. En la fotografía de la izquierda, Rominna acaricia su pancita de embarazada en una de las tantas escaleras del cerro (la Leíto se estaba moviendo), mientras que en la foto de la derecha, posa con Gonzalo en un balconcito de la terraza del Hotel Brighton, con el magnífico mural de Inti Castro de fondo, y más allá, la ciudad de Viña del Mar.
En el cafecito del Brighton nos tomamos un jugo y aprovechamos de tomar algunas fotografías. A Rominna le había gustado la foto de la silueta embarazada de Anisa que hice a fines del año pasado, así que le propuse que tomáramos una fotografía de su silueta en la puerta del café. Y claro, no podíamos pasar por alto el piso de la terraza.
Del cerro Concepción nos trasladamos a la nunca-bien-ponderada playa San Mateo (y que podría desaparecer de aprobarse aquéllo del Mall Barón), porque si recuerdan Rominna estaba interesada en hacer la sesión de fotos en la playa. El cambio de vestuario lo hicimos antes de salir del Brighton, donde también tomamos esta imagen de los exquisitos zapatitos rosados de Leonor.
La imagen de arriba y la de abajo son mis favoritas de esta sesión. En la primera, Rominna es el agua salada del mar que surge y explota para besar al padre de la bebé que lleva en su vientre. Y en la segunda, es la mujer salvaje que en plena libertad decide darle vida a un nuevo ser dentro su cuerpo.
Lo pasamos tan bien, que me vine a la casa con los jeans mojados hasta la rodilla y los pies cubiertos de arena. Feliz :-)
