Actualmente las familias se conforman de variadas formas y variados miembros, ya hemos visto algunas cuando el grupo es grande o cuando incluyen a las mascotas, y hoy quiero mostrarles cuando la familia es una dupla. Esta sesión fotográfica familiar es de mamá e hija. Nelly y Antonella que cumplía un año.
Primero, nos encontramos en su casa en Curauma y después nos fuimos a la Laguna de la Luz que también tiene un bosque mágico ¡Me gustó tanto retratarlas! porque muestra que la vida nos lleva a encontrarnos con el amor sin seguir “las reglas” que por muchos años nos han impuesto. Y compartir esas realidades diversas es necesario hoy; porque hacen sentir a otros que no están solos, que hay muchos y muchas haciendo familia sin seguir patrones tradicionales.
Antonella es una niña exquisita, alegre y de mucha luz. Sus ojos brillantes me maravillaron y fue un día increíble porque Anto dio sus primeros pasos frente a la cámara!
La complicidad de ambas traspasa el lente, su amor infinito es suficiente para obtener una hermosa fotografía. Y el cintillo de flores las hizo parecer dos hadas del bosque.
Esta dupla explota de bellas.
Fue una linda sesión y una gran ocasión poder retratar a otra familia donde el cuidado y la entrega se siente a kilómetros. Gracias Nelly por dejarme capturar su cariño, el hito del primer año de Antonella en tu vida y mostrar que el número de integrantes no tiene relevancia en el amor.
